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Repuestos de pantallas táctil para phablet de 6 pulgadas de cualquier marca, cristal touch, digitalizador...
Las primeras Tablets se fabricaron en el año 2004. No eran como las que se utilizan generalmente en la actualidad, la longitud diagonal de sus pantallas era de 20 pulgadas y estaban destinadas principalmente a profesionales como arquitectos, encargados de almacén, ingenieros y todas aquellas profesiones que requerían el uso práctico de un dispositivo con sistema operativo Windows, que fuese fácil de transportar, utilizar y al mismo tiempo resistente. La posibilidad de utilizarlas con función táctil las hizo más cómodas, funcionales y bien recibidas entre los profesionales.
Años más tarde, en 2010, Apple presentó su IPad al público en general. Se trataba de una versión de Tablet más asequible para todos los públicos, aunque su superficie de pantalla medía la mitad que las Tabletas creadas para profesionales y su peso también era menor. Estas Tabletas medían 10 pulgadas y sus funciones fueron creadas para el ocio multimedia y la navegación por Internet. Más tarde otras marcas lanzaron su modelo de Tablet al mercado. Las pantallas de las primeras Tabletas domésticas medían 10 pulgadas, es decir, 25,4 cm. Una pulgada equivale a 2,54 cm.
En el año 2012 se lanzó el IPad Mini, este modelo de Tablet medía 7 pulgadas. Se creó para competir con otros modelos como el Nexus 7 y el Kindle Fire Hd, basados en Android. En la actualidad existen Tabletas de uso doméstico que miden desde 4,3 pulgadas hasta 17,3 pulgadas, dependiendo de su uso y necesidades la medida de la Tablet puede ser muy importante. La medida media que se utiliza es la Tablet de 10 pulgadas, desde 10 hasta las medidas menores resultan más cómodas para transportar, aunque no cuentan con las ventajas de las pantallas más grandes. Este tipo de Tablet se utiliza para mirar vídeos, fotografías, jugar o cualquier uso no profesional. El inconveniente es que cuanto más pequeña es la pantalla menor superficie para la imagen posee.
La Tablet de 7 pulgadas que podemos encontrar en casi todas las marcas de Tablet tienen una serie de ventajas sobre las de mayor tamaño. Son fáciles de transportar, se pueden guardar en un bolsillo, son cómodas, pesan la mitad que una Tablet de 10 pulgadas, se pueden leer libros o periódicos con facilidad, consultar el correo electrónico y también pueden ser utilizadas como GPS. Se trata de un ordenador de bolsillo que, si cuenta con conectividad 3G/4G resulta totalmente práctica para los desplazamientos de los usuarios y sus necesidades durante los mismos. Generalmente su precio es bastante menor que el de una Tablet de 10 pulgadas.
En la versión de 7 pulgadas se pueden encontrar Tablets de marcas como Google Nexus 7, Fire de Amazon, Samsung Galaxy Wi-Fi, Asus Memo Pad HD 7, entre otras. Cada una de ellas tiene unas características que las harán más o menos adecuadas para cada tipo de usuario, por ese motivo es aconsejable saber cómo elegirlas.
Cuando se consulta el punto de venta de una Tablet es recomendable tener una noción de lo que se necesita. No como una persona experta pero sí como alguien que tiene claras sus necesidades porque no siempre la Tablet al mejor precio será la indicada para alguien en concreto. Así, para elegir cualquier tipo de Tablet se ha de tener en cuenta:
iOS es muy seguro, ofrece una gran garantía y su calidad es excelente; sin embargo, solo funciona con la marca Apple, no se puede modificar y hay que utilizar los programas especificados para diversas acciones como escuchar música o descargar aplicaciones.
Por su parte, Windows está creado más para ordenadores, es adecuado en Tablets si lo que se desea es utilizarla como un pequeño ordenador.
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Las tablets son muy compactas, pesan menos que los ordenadores portátiles, consumen menos energía y funcionan más horas sin que sea necesario recargar la batería. Son funcionales y permiten realizar un buen número de acciones. Sin embargo, en ocasiones su pantalla se daña por muchas razones, puede ser por una caída, un golpe, exposición a altas temperaturas, presionar demasiado fuerte sobre la pantalla, que esta esté hecha de un material demasiado delicado o por un defecto de fabricación.
Sea cual sea el motivo lo cierto es que la pantalla y sus componentes son imprescindibles para que la Tablet funcione y comprar una nueva no siempre es posible o, debido a la costumbre de utilizar la misma y a tener la información que necesitamos en ella no nos conviene cambiarla por otra. Cambiar la pantalla de la Tablet puede resultar sencillo y práctico si sabemos bien lo que necesitamos y lo que estamos haciendo. Se debe tener en cuenta que se trata de una operación delicada, si no se hace con precisión se pueden dañar otros elementos de la Tablet que van integrados en la pantalla de modo que, al cambiar la pantalla de la Tablet, debemos tener la suficiente seguridad de que podemos hacerlo nosotros mismos o confiar en alguien que lo haga por nosotros.
Para la sustitución de la pantalla de nuestra tablet, es necesario tener en cuenta una serie de pautas ya que las marcas de Tablet son varias y algunas pueden no ser muy conocidas:
El cable flex es una pieza muy delicada de la pantalla que se puede romper al manipularlo, en caso de que ello ocurra es posible arreglarlo pero se trata de una tarea de gran precisión ya que se trabaja con milímetros por lo que en ocasiones vale la pena comprar otro cable flex en una tienda de repuestos baratos.
En el mercado existen dos tipos y es necesario saber a cuál pertenece la pantalla que necesitamos. Puede ser resistiva o capacitativa, la base de ambos tipos de pantalla de Tablet es la misma ya que los dos tipos de paneles controlan los flujos de corriente eléctrica que circulan en ellos. La diferencia entre las pantallas resistivas y las pantallas capacitativas se encuentra en la forma en la que estos flujos de corriente eléctrica actúan ante la interacción del usuario con la pantalla.
En el cristal táctil resistivo, un sensor va cambiando según se mueve el punto de contacto. De esta forma se obtienen dos coordenadas, valores que se transformarán en un código digital.
Encontrar el cristal resistivo para la pantalla, con las características que se desean, no siempre es sencillo. Entre las cuestiones más importantes a considerar, está la de la polaridad. Las resistencias de este sector tienen salidas positivas y negativas.
En la compra de una pantalla con un sensor nuevo, hay que medir el tamaño del sensor original con mucha precisión.
Las pantallas para Tablet resistivas tienen una mayor precisión al hacer contacto sobre ellas, son más resistentes a los golpes, arañazos, a la humedad y al polvo; también tienen un bajo coste de fabricación. Tienen dos capas, la externa es flexible y la interna es más rígida. Es entre estas dos capas donde se encuentra el paso de la corriente eléctrica, esta se concentra en el punto sobre el que hacemos presión con el dedo.
El panel tiene una carga eléctrica que se distribuye de manera que esta corriente es más o menos alta según lo que necesita cada acción, al tocarlo varía la forma del reparto de la corriente y se concentra en el punto en el que estamos tocando. En las pantallas capacitativas se puede presionar en distintos puntos y obtener una respuesta, un ejemplo es el zoom que utilizamos al hacer una fotografía. Para conseguirlo es necesario contar con un sistema operativo que reconozca las órdenes y procese correctamente la presión en varios lugares al mismo tiempo. Estas pantallas son menos resistentes y en algunos terminales es necesario utilizar punteros para trabajar con ellos, su precisión es menor que la de las pantallas resistivas y si se utilizan guantes no reconocerá el contacto de los dedos y no habrá ninguna reacción entre el campo eléctrico de nuestro cuerpo y el de las Tablets. Su coste de fabricación es más elevado.